viernes, 9 de noviembre de 2007

¿TABASCO TRAGEDIA INEVITABLE?

¿TABASCO TRAGEDIA INEVITABLE?

Eduardo Galván Cobos

En estos últimos días, el comentario cotidiano no es más que lo ocurrido en el estado de Tabasco, la noticia sobrepasó las fronteras de nuestro país por su magnitud y ya se han visto resultados de la solidaridad internacional con los apoyos enviados para los damnificados. Pero también se escucharon voces de alarma y de señalamientos directos al gobierno de Tabasco ya que de acuerdo a las nuevas tecnologías y al permanente llamado por parte de los países o estados que en alguna ocasión sufrieron los estragos de la infalible naturaleza, es necesario tener una latente alerta y educación sobre cómo actuar en caso de la presencia de algún fenómeno natural, sabemos que algunos de éstos son poco predecibles como los terremotos, sin embargo en caso de los huracanes o las épocas en la que lloverá con mayor consistencia ya son de orden prioritario para protección civil y principalmente cuando se cuentan con presas que al sobrepasar los márgenes de su capacidad pueden causar una catástrofe como la que estamos presenciando en la actualidad en Tabasco. El gobierno tiene la obligación de mantener información puntual y precisa a todos los habitantes que viven en zonas de riesgo, pero también a toda la ciudadanía, ya que es menos costosa la prevención que la reconstrucción.

Por otro lado, ya no es tiempo de lamentar. Sin embargo, en muchos estados existen ríos o lagunas que en épocas de lluvias sobrepasan su cauce natural y pueden afectar a muchas familias si no están preparadas, principalmente para salvaguardar la integridad de los habitantes. Lo que pasó en Tabasco y el deslave del cerro en San Juan Grijalva, Chiapas, debe servirnos como otra más de las malas experiencias que hemos presenciado para sobrevaluar nuestro actuar preventivo y en su caso redoblar esfuerzos para que la sociedad esté advertida y no nos tome por sorpresa.

Es muy triste y lamentable ver lo que están viviendo los tabasqueños que no es nada más lo que se ve en las fotografías o en las noticias, de verdad que te impresiona cuando te lo cuentan las personas que vivieron este desastre o de aquellas personas que han ido en estos días para saber que pasa con su familia, el desastre es magno y lo que viene puede ser más si no se actúa con decisión y precisión por que los brotes epidemiológicos tienen su raíz en los lugares devastados ya que existen grandes cantidades de animales muertos y descompuestos que están al aire libre, tanto así que ya se pueden ver a los depredadores en acción como a los lagartos y otros. Afortunadamente todavía no se presenta el pánico ciudadano pues éste es incontrolable.

En los tiempos difíciles los mexicanos hemos demostrado que somos mucho más que grupos espaciados por los credos o por la política, siempre nos caracterizamos por tender la mano a quienes lo necesitan y esto se puede demostrar con la actitud de nuestros hermanos forman filas en los centros de acopio para donar lo poco que tienen, pues hay quienes se privan de satisfacer alguna necesidad personal con tal de participar en esta cruzada altruista. Es confortante distinguir a mucha gente de bajos recursos remitiendo su participación, es tiempo imperante para que los dueños de las empresas y consorcios, retribuyan a la economía fracturada de los tabasqueños una pequeña parte de la gran cantidad de recursos que por años obtuvieron de la sociedad, una sociedad que seguirá demostrando su fortaleza y su compromiso por México.

¡ESTAMOS CONTIGO TABASCO!