Eduardo Pérez Roque
Como es de todo sabido, el próximo domingo 27 julio, 10 y 24 de agosto se realizará la Consulta Ciudadana por la No Privatización del Petróleo a la que convoca el Movimiento Nacional en Defensa del Petróleo y con la cual culmina una etapa de una lucha en la que el pueblo de México se ha unido más allá de siglas partidistas, sectores sociales u origenes ideológicos.
Manifestamos que con esta consulta culmina una etapa más, apenas concluido el debate convocado por el Senado de la República, de la actual lucha del pueblo de México por seguir siendo propietario de una de las fuentes de ingreso más fuertes con que cuenta la nación, ya que esta cruzada seguirá al votarse en el Senado de la República la iniciativa enviada por el Ejecutivo Federal y que atenta contra la historia de México, aunque se quiera cubrir con falacias técnicas, financieras, jurídicas y políticas.
Pero más allá de todos los aspectos que hemos mencionado, se tiene que expresar que estamos ante una lucha ideológica entre derecha e izquierda, lo que significa que estamos entre dos proyectos de nación, dos visiones del país, dos perspectivas del futro de México y, por lo tanto, ante dos alternativas de acción colectiva, dos tipos de actuar poítico, dos sentidos sociales del quehacer individual ante los cuales no podemos permanecer con una actitud pasiva, como ciudadanos que no cumplen con su obligación de participar en las grandes decisiones de nuestra patria.
Mucho se ha denostado al Movimiento Nacional en Defensa del Petróleo, pero también, tenemos la seguridad, de que el próximo domingo, muchos seremos los mexicanos que acudiremos a depositar nuestra opinión, nuestro voto a favor de que el petróleo continue siendo de los mexicanos.
Se ha mencionado que la Consulta Ciudadana no procede presentando diversos argumentos, ante los cuales basta recordar algunos aspectos básicos:
1. “Constituye un ejercicio de participación ciudadana en el cual la gente puede opinar sobre las iniciativas enviadas al Senado de la República en materia energética” por el Ejecutivo Federal.
2. “Es un ejercicio de participación ciudadana previsto en la ley; convocamos porque se trata de un asunto de la mayor importancia para todos y es legítimo que la aprobamos”.
Como es de todo sabido, el próximo domingo 27 julio, 10 y 24 de agosto se realizará la Consulta Ciudadana por la No Privatización del Petróleo a la que convoca el Movimiento Nacional en Defensa del Petróleo y con la cual culmina una etapa de una lucha en la que el pueblo de México se ha unido más allá de siglas partidistas, sectores sociales u origenes ideológicos.
Manifestamos que con esta consulta culmina una etapa más, apenas concluido el debate convocado por el Senado de la República, de la actual lucha del pueblo de México por seguir siendo propietario de una de las fuentes de ingreso más fuertes con que cuenta la nación, ya que esta cruzada seguirá al votarse en el Senado de la República la iniciativa enviada por el Ejecutivo Federal y que atenta contra la historia de México, aunque se quiera cubrir con falacias técnicas, financieras, jurídicas y políticas.
Pero más allá de todos los aspectos que hemos mencionado, se tiene que expresar que estamos ante una lucha ideológica entre derecha e izquierda, lo que significa que estamos entre dos proyectos de nación, dos visiones del país, dos perspectivas del futro de México y, por lo tanto, ante dos alternativas de acción colectiva, dos tipos de actuar poítico, dos sentidos sociales del quehacer individual ante los cuales no podemos permanecer con una actitud pasiva, como ciudadanos que no cumplen con su obligación de participar en las grandes decisiones de nuestra patria.
Mucho se ha denostado al Movimiento Nacional en Defensa del Petróleo, pero también, tenemos la seguridad, de que el próximo domingo, muchos seremos los mexicanos que acudiremos a depositar nuestra opinión, nuestro voto a favor de que el petróleo continue siendo de los mexicanos.
Se ha mencionado que la Consulta Ciudadana no procede presentando diversos argumentos, ante los cuales basta recordar algunos aspectos básicos:
1. “Constituye un ejercicio de participación ciudadana en el cual la gente puede opinar sobre las iniciativas enviadas al Senado de la República en materia energética” por el Ejecutivo Federal.
2. “Es un ejercicio de participación ciudadana previsto en la ley; convocamos porque se trata de un asunto de la mayor importancia para todos y es legítimo que la aprobamos”.
3. Las preguntas fueron elaboradas por expertos de las universidades Nacional Autonóma de México y Autonóma Metropolitana y el Instituto Politécnico Nacional.
4. Significa un ejercicio democrático al que nadie le debe temer, pues el resultado será la percepción que el pueblo mexicano tiene de una acción altamente cuestionada y en torno a la cual no existe consenso alguno.
5. Será la respuesta a la desafortunada e insolente opinión del director de PEMEX, respecto a que “es un tema muy complejo del que el pueblo no puede opinar”, que significó una ofensa a la inteligencia de los mexicanos y una falta de respeto a toda la ciudadanía.
Los anteriores aspectos básicos que fundamentan a la Consulta Ciudadana del próximo día 27, además de otros que serían motivo de un trabajo especial, nos obligan a invitar a nuestros visitantes para que acudan a votar el próximo domingo contra la privatización del petróleo de México.
www.eperezroque.blogspot.com