PERSEVERANCIA CIUDADANA Y EL PROCESO ELECTORAL LOCAL 2007

A LAS CIUDADANAS Y CIUDADANOS

PERSEVERANCIA CIUDADANA Y EL PROCESO ELECTORAL LOCAL 2007

La Asociación Civil Perseverancia Ciudadana surge en el año 2001 como una organización plural de carácter no lucrativo, que se constituye en un grupo de opinión para fomentar los deberes cívicos entre sus miembros, en la comunidad jalapeña y veracruzana y la sociedad en general.

Esta Asociación Civil tiene entre sus objetivos: promover los deberes cívicos y la cultura democrática, a través de la participación colectiva para coadyuvar en la transformación y desarrollo social, político y cultural de nuestra ciudad, la entidad y el país.

Al considerar lo anterior, Perseverancia Ciudadana da a conocer su opinión respecto al actual proceso electoral local, que culminará el próximo domingo 2 de septiembre.

Una revisión objetiva de las diferentes etapas por las que ha pasado este proceso electoral se tiene que contextualizar considerando diferentes factores y elementos que lo han impactado y que, por un lado, lo hacen similar a otros anteriores y, por otro, lo caracterizan de manera diferente.

Algunos de estos factores son los siguientes:

1. Un nuevo Código Electoral, altamente cuestionado desde su entrada en vigor.

2. Una institución organizadora y operadora del proceso, el Instituto Electoral Veracruzano, que se ha venido caracterizando como una institución débil, que no goza de la credibilidad y la confianza del electorado veracruzano.

3. El crispamiento del ambiente político-electoral debido al señalamiento de la intromisión de los gobiernos federal y estatal en el proceso electoral, más allá de que existan pruebas o no.

4. La consideración de que este proceso y sus resultados serán el preámbulo o indicador de lo que suceda en el proceso electoral de 2010, donde se renovará el Poder Ejecutivo Estatal.

Al considerar los anteriores factores, se pueden señalar algunas características del actual proceso electoral, las cuales podrían ser analizadas de manera mucho más amplia, pero que en este caso requieren concreción y especificidad. Algunas son las siguientes:

Las luchas de grupos de interés al interior de los partidos políticos, lo que se refleja necesariamente en la postulación de candidatos inesperados y que provocan el tránsito de militantes que esperaban ser favorecidos con una candidatura hacia otros partidos.

La proliferación de alianzas o coaliciones también inesperadas entre partidos tradicionalmente opuestos, lo que ha provocado que las ideologías de cada partido se hayan hecho a un lado.

La escasa difusión de las plataformas electorales de cada partido o coalición, lo que ha motivado diferentes aspectos: desconocimiento por parte de los candidatos de la ideología del partido que lo postula; dificultad para imaginarse la simbiosis de las ideologías no siempre coincidentes de los partidos que han integrado coaliciones; coincidencia de propuestas de los candidatos que han caído en el lugar común y en la repetición de supuestas soluciones a problemas municipales, etc.

La sobrevaloración de la mercadotecnia electoral, lo que ha ocasionado una guerra de propaganda que invaden las principales ciudades y que constituyen un derroche de recursos que ofenden la situación de pobreza de miles de veracruzanos.

Unos supuestos debates organizados por el IEV, que han resultado ser más que la contrastación de propuestas y soluciones a problemas municipales y regionales, la lectura de tarjetas seguramente no elaboradas por los candidatos, dado que su misma lectura les ha resultado difícil y realmente penosa, si bien no en todos los casos. A lo anterior se puede agregar el claro desconocimiento de algunos candidatos de los problemas que aquejan a sus comunidades y la sustitución de propuestas por insultos, diatribas y descalificaciones. En algunos casos los candidatos a presidentes municipales parecían ser a diputados, y en otros los candidatos a legisladores parecían serlo a alcaldes.

El desequilibrio en los recursos de los que han gozado algunos candidatos, mientras que otros han caracterizado sus campañas por la escasez de fondos para manejar propaganda ostentosa y obsequiar regalos u otros objetos a los electores, jugando con las necesidades apremiantes de la población con bajos ingresos.

La influencia cada vez mayor de los medios de comunicación, que más que ser considerados como mediadores entre la ciudadanía y los candidatos, son manejados como una empresa en el marco de la mercadotecnia electoral. Al fin y al cabo, empresas son y como tal se manejan.

A lo anterior, se podrían agregar otros aspectos. De una manera u otra los ciudadanos y las ciudadanas no podemos admitir lo que un comentarista expresó respecto a que la manera en que se ha realizado el actual proceso electoral es lo novedoso y lo que le otorga atracción.

Algunos comentaristas han opinado que ante lo caótico de la gravedad del actual proceso electoral, la mejor opción es abstenerse de acudir el próximo domingo a votar. Eso tampoco lo podemos admitir, pues desde un punto de vista formal, estaríamos faltando a una obligación que como ciudadanos tenemos. Pero más allá de abstenernos simplemente, estaríamos permitiendo y coadyuvando a que muchos aspectos del desarrollo político, social y económico de nuestra entidad permanezcan igual o, incluso, retrocedan.

Por todo lo anterior, Perseverancia Ciudadana, opina que el próximo domingo:

Todos los ciudadanos y ciudadanas acudan a emitir su voto sin permitir que bajo ninguna circunstancia o debido a algún factor laboral, se le presione para orientar su sufragio hacia un partido u otro.

Los electores inviten a sus familiares, amigos, compañeros de trabajo, vecinos y a toda su comunidad para que también emitan su voto y de esta manera no vuelva a triunfar el abstencionismo, lo que resta legitimidad a los resultados del proceso.

Los ciudadanos y las ciudadanas razonen su voto, analizando las propuestas de cada candidato, su trayectoria, su perfil profesional, etc. Se trata de emitir un voto que vaya de acuerdo con nuestras aspiraciones como ciudadanos y con la visión que tenemos de las leyes y los programas de desarrollo que requieren nuestra identidad y nuestro municipio.

ATENTAMENTE.



Xalapa, Ver., 28 de septiembre de 2007